La salud cardiovascular y la andrología están estrechamente vinculadas, ya que muchas de las condiciones que afectan al corazón pueden tener repercusiones en la salud sexual masculina y viceversa.

Es importante destacar que la disfunción eréctil (DE) se conoce como  síntoma centinela de eventos cardiacos, angina e infarto. Síntoma centinela quiere decir que puede ser el primer síntoma de una enfermedad de base no diagnosticada, como la hipertensión arterial, la diabetes o la hipercolesterolemia entre otros; todos ellos considerados importantes factores de riesgo cardiovascular.

Existe amplia evidencia científica que demuestra la relación existente  entre la disfunción eréctil y el riesgo coronario, por lo que se hace necesario en algunas ocasiones, realizar exploraciones complementarias que permitan  la detección de estas enfermedades y una evaluación del riesgo cardiovascular. 

Clasificación del Riesgo Cardiovascular

Esta clasificación se basa en el  II Consenso de Princeton, que distingue 3 clases de pacientes según sus factores de riesgo vascular:

  1. Riesgo bajo: pacientes que no tienes síntomas y tienen pocos factores de riesgo.  
  2. Riesgo intermedio: pacientes con algunos síntomas o con mayor número de factores de riesgo. Suele ser necesaria la valoración por un cardiólogo.
  3. Riesgo alto: pacientes con patología cardíaca o vascular grave. 

Recomendaciones para pacientes con problemas cardíacos considerando la perspectiva andrológica

1. Controlar los factores de riesgo cardiovascular

Uno de los pilares fundamentales en el cuidado del corazón es mantener bajo control los llamados factores de riesgo cardiovascular (hipertensión arterial, hipercolesterolemia, diabetes mellitus, sedentarismo, alcohol, tabaco). Estos factores no sólo aumentan el riesgo de eventos cardíacos, sino que también pueden interferir en la función sexual, ya que afectan el flujo sanguíneo necesario para lograr y mantener una erección. 

Aconsejable modificar estilo de vida:

  • Dejar de fumar
  • Limitar o evitar consumo alcohol 
  • Dieta sana
  • Practicar ejercicio con regularidad

2. Monitorizar los efectos secundarios de los fármacos.

Algunos de los fármacos frecuentemente utilizados ( beta bloqueantes, diuréticos, etc) pueden tener efectos secundarios sobre la función sexual, incluyendo disminución de la libido y más frecuentemente DE. 

Si la disfunción sexual es secundaria al fármaco, debemos considerar la posibilidad de ajustarlo o sustituirlo por otro que tenga menos impacto sobre la erección.

3. NO está CONTRAINDICADA la actividad sexual en pacientes cardiópatas con DE

El riesgo de que un enfermo coronario tenga una crisis  por tener relaciones sexuales es muy bajo y casi desaparece con las medidas médicas habituales. Los gastos energéticos y cardiovasculares durante la actividad sexual equivalen a los realizados en la vida diaria.

Sólo en casos de cardiopatía grave, en la que el especialista en cardiología  desaconsejara la actividad física, estaría contraindicada la actividad sexual.

4. SI se puede TRATAR la DE en pacientes con riesgo cardiovascular

Podemos recurrir a las distintas opciones terapéuticas disponibles en la actualidad ( fármacos, tratamientos tópicos y/o cirugía) valorando las necesidades del paciente y finalmente decidiendo de forma consensuada la mejor para él. 

Los fármacos vía oral ( Viagra sigue siendo el más conocido) son muy utilizados en este grupo de pacientes. Sólo están contraindicados si hay tratamiento concomitante con nitratos.

Importante resaltar que el tratamiento es siempre individualizado

5.Buscar ayuda psicológica si es necesario

El regreso a la vida sexual puede suponer uno de los mayores conflictos de quien ha tenido un evento  coronario.

El impacto psicológico de vivir con una enfermedad cardiovascular puede afectar la vida sexual y emocional del paciente. La ansiedad y el estrés relacionados con el miedo a sufrir un ataque cardíaco durante la actividad sexual pueden generar problemas de DE o pérdida de interés sexual. En estos casos, buscar apoyo psicológico puede ser muy beneficioso para manejar estos temores y mejorar la calidad de vida del paciente.

Recordar

  • No ignorar la DE

La DE puede ser una señal temprana de problemas cardiovasculares. 

La salud cardiovascular y la salud sexual están estrechamente relacionadas, especialmente en los hombres. Cuidar el corazón implica también cuidar la función sexual, ya que ambos sistemas dependen de una buena circulación sanguínea y del equilibrio en el cuerpo. 

  • Modifica tu estilo de vida

Adoptar un enfoque integral que incluya cambios en la dieta, el ejercicio, el control de factores de riesgo y la consulta médica regular puede mejorar significativamente tanto la calidad de vida como el bienestar sexual.

  • Es fundamental seguir las recomendaciones médicas 

Habla con tu médico, consulta tus dudas  y cumple las recomendaciones que te proporcione en cuanto a medicación, dieta y ejercicio físico.